La porosidad del cabello es un factor clave pero ha pasado por alto en el cuidado capilar. ¿Alguna vez te has preguntado por qué ciertos productos funcionan mejor en tu cabello que otros? La respuesta puede estar en la porosidad de tu cabello. 

¿Qué es la porosidad del cabello?

La porosidad del cabello se refiere a la capacidad de tu cabello para absorber y retener la humedad y los nutrientes. Esto está influenciado por la estructura de la cutícula del cabello, la capa externa que actúa como una barrera protectora. La porosidad puede clasificarse en tres categorías principales: baja, media y alta.

¿Cómo determinar la porosidad del cabello?

Existen varias formas de determinar la porosidad del cabello. Una de las formas más comunes es realizar la prueba del vaso de agua. Simplemente coloca un mechón de cabello limpio y seco en un vaso de agua. Si el cabello flota en la superficie, es probable que tenga baja porosidad. Si se hunde lentamente, tiene porosidad media, y si se hunde rápidamente, es probable que tenga alta porosidad.

¿Por qué es importante conocer la porosidad de tu cabello?

Comprender la porosidad de tu cabello es fundamental para elegir los productos y tratamientos adecuados. Por ejemplo, si tienes cabello de alta porosidad, es probable que necesites productos más ricos en ingredientes hidratantes para ayudar a sellar la cutícula y retener la humedad. Por otro lado, si tienes cabello de baja porosidad, es posible que necesites productos más ligeros que no pesen demasiado tu cabello.

Cómo cuidar diferentes tipos de porosidad:

Baja porosidad: Los productos livianos como acondicionadores y aceites de absorción rápida son ideales. Evita el exceso de proteínas, ya que pueden dejar el cabello rígido y quebradizo.

Media porosidad: Este tipo de cabello generalmente responde bien a una amplia gama de productos. Mantén un equilibrio entre la hidratación y la proteína para mantener la salud del cabello.

Alta porosidad: Opta por productos ricos en ingredientes hidratantes y selladores de humedad. Los tratamientos con proteínas pueden ayudar a fortalecer el cabello, pero úsalos con moderación para evitar la rigidez.

La porosidad del cabello es un factor crucial a considerar en tu rutina de cuidado capilar. Al conocer tu tipo de porosidad y adaptar tus productos y tratamientos en consecuencia, puedes ayudar a mantener tu cabello saludable, fuerte y vibrante.